Hoy me dedico al 100% a la música, aunque no siempre fue así. Durante mis primeros años, debido a mi interés por la tecnología, me enfoqué en la programación de aplicaciones de escritorio, web y luego móviles, así como en el diseño gráfico, especialmente en el ámbito del 3D. Y eso me mantuvo ocupado trabajando para agencias de publicidad y diversas empresas de diferentes sectores.
Comencé a programar de forma autodidacta en un Atari 800 XL en los años 80. Durante esa época, mis principales fuentes de conocimiento eran libros y revistas que me permitían aprender diversos conceptos y técnicas. Estas experiencias me ayudaron a comprender cómo interactuar con una computadora y desarrollar programas funcionales.
En cuanto al diseño, me interesaba que mis programas tuvieran un aspecto visual más atractivo y menos técnico. Esto despertó mi interés por comprender la tecnología visual de las computadoras y aprender a controlar los gráficos y el movimiento. El mundo del 3D se convirtió en un desafío fascinante para mí, incluso con el limitado Atari 800 XL como herramienta. Lo que más tarde me llevaría al desarrollo web y modelado 3D de forma paralela durante los años 90 e inicios del siguiente siglo.
La música llegó a mi vida en forma de un piano acústico vertical que fue llevado a mi casa, en medio de todo mi interés por aprender a programar. Fue un mundo completamente nuevo para mí poder escuchar el sonido de un instrumento real: las cuerdas, los martillos y esa resonancia que perduraba durante unos segundos y envolvía mi cabeza.
Hacia medidados de los años 90, tuve la oportunidad de participar en grupos musicales y fui bendecido al integrarme en un estudio de grabación, donde trabajé como músico de sesión y ayudante del ingeniero. Fue en ese contexto donde surgieron mis primeras composiciones y mi primer álbum.
Durante las dos primeras décadas del siglo XXI, me dediqué a trabajar como freelancer en programación y diseño. Sin embargo, a partir de 2017, gradualmente cambié mi rumbo hacia la música, con el objetivo de dedicarme por completo a componer y producir, tanto mis propias canciones como para otros artistas.